Sigue el Uribismo ajustando sus fichas con miras a las elecciones del 2022 y el protagonista las últimas semanas ha sido el hijo del ex presidente Uribe, Tomás Uribe Moreno, quien ha sonado para presidente, cabeza de lista de senado por el centro democratico y ahora posible figura a la vicepresidencia.
¿Vicepresidente?
Pues lo cierto es que el nombre de Tomás ha venido tomando relevo en el ambiente y empezó a generar todo tipo de celos y diferencias en el partido de ultra derecha, pues para nadie es un secreto que nombres como Paloma Valencia, María Fernanda Cabal y Nieto, están haciendo fila por la carrera presidencial, sin contar con otros nombres que puedan surgir de su buro político.
Álvaro Uribe por su parte ha tenido que resguardarse al ver que es su hijo quien está en medio de este lleva y trae de opiniones, lo cierto es que el propio nombre de Tomás rompe de plano varios intereses del Uribismo, acaba de plano con las aspiraciones de varios y de paso une al sector más extremista del Uribismo pura sangre.
Veremos que sucede pero de momento el nombre de Tomás se está sobre llevando con pinzas para no causar una ruptura aún más fuerte en el centro democratico que los lleve a distanciarse más entre sí, en las regiones, los caciques del centro democratico no lo ven con buenos ojos, aunque en público no se atrevan a decirlo y en las bases sociales e ideológicas del Uribismo, el hecho de que sea el hijo del patriara, les da un aire de seguridad que con ivan Duque el. Uribismo no ha tenido en estos años de gobierno que han pasado y ven la necesidad de dar un mensaje contundente a la sociedad Colombia y al Petrismo que esta apuntalando hacia la casa de Nariño, en cabeza de Gustavo Petro, Aída Avella y Gustavo Bolivar de momento se encuentra el bloque que buscará llegar a la casa de nariño, de ahí a que se establezcan alianzas.
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